lunes, 14 de diciembre de 2009

Introducción al RFID y sus aplicaciones en la Cadena de Distribución

La tecnología Radio Frequency Identification (RFID) no es nueva, se conoce desde 1940, pero recién en los últimos años se han alcanzado los avances tecnológicos suficientes para ponerlo
en práctica en la cadena de distribución. La cadena alemana Metro, la norteamericana Wal Mart y el departamento de Defensa de los Estados Unidos han pedido a sus principales proveedores que comiencen a implementar microchips que utilicen esta tecnología para sus envíos. Por su parte, compañías como Gillete o Procter & Gamble están experimentando con el uso de sistemas RFID en almacenes para prevenir pequeños hurtos y monitorizar el inventario de sus estanterías. Aqui en México empresas como Liverpool ya están utilizando RFID en su cadena de suministro.

La tecnología RFID consiste de una pequeña etiqueta electrónica o “tag” que contiene un minúsculo microprocesador y una pequeña antena de radio, colocados en un pallet, un embalaje y/o un artículo, con un identificador único (de 64 ó 96 bits) llamado Código Electrónico de Producto (EPC por sus siglas en inglés).

A su vez, un lector de radiofrecuencia (RF) se coloca en puntos estratégicos a lo largo del camino donde se trasladan los pallets, embalajes o artículos en su recorrido desde el punto de origen del proceso de manufactura hasta el punto de exhibición. La colocación de estos lectores puede abarcar el piso, las puertas, los montacargas del almacén, el andén deembarque, el centro de distribución, el andén de recibo, la bodega de la tienda, y así sucesivamente, incluyendo los anaqueles de la tienda.

Cuando una etiqueta RFID pasa a través de un punto de verificación, el lector de RF sensará el EPC de la etiqueta si es etiqueta activa (etiqueta alimentada por una batería) o bien se emitirá una onda o señal de RF a fin de inducir una corriente a la antena de la etiqueta pasiva (etiqueta sin batería interna). Luego, la información de la etiqueta es leída y enviada a una base de datos intermedia (“Middleware”), donde se despliega una gran cantidad de de información sobre lo que está etiquetado, y se activan mecanismos de integración con los sistemas de información del negocio.

La implementación del software preparado para RFID, es crítica para explotar todo el valor de las operaciones basadas en RFID. Este software procesa los datos RFID, controla los flujos de
trabajo o transacciones de negocio, y transfiere los datos RFID a otros sistemas de información (EDI o ERP por ejemplo). Puede tratarse de un software para atender requerimientos específicos de clientes (impresión o lectura de etiquetas RFID, crear ASN1 basados en lecturas RFID, etc), adecuaciones a los actuales sistemas logísticos o WMS2 (por ejemplo, recepción automática RFID) o extensiones a los actuales WMS para contar con información a tempo real de los productos a lo largo de toda la cadena de distribución.

RFID en la Cadena de Distribución
Aunque RFID ya es una tecnología madura, su despegue en el mundo de la distribución está vinculado a la introducción del estándar de codificación EPC3 (código electrónico de producto), que permitirá rastrear y trazar el recorrido de los productos a medida que éstos viajen entre todos los socios de una cadena de distribución, sin necesidad de intervención humana, que generalmente es requerida con sistemas basados en códigos de barras. De esta manera, esta tecnología previene la falta de inventario en los puntos de venta, el hurto y los errores administrativos. A continuación se muestra una visión de RFID en la cadena de distribución:



1) FABRICACIÓN
En esta etapa se aplican físicamente las etiquetas RFID a los productos (o embalajes) y les son grabados un ID único (EPC), que son asociados con los detalles de la orden o del pedido para facilitar el rastreo y la gestión de excepciones. Durante el proceso de construcción del pallet, los productos son identificados automáticamente para asistir con la configuración de las órdenes de los clientes. Finalmente, los pallets son identificados y rastreados mientras son movilizados a la zona de despacho.

2) FABRICANTE --> RECOJO
Mientras el transportista llega a la plataforma de carga del fabricante, un lector RF ubicado en la plataforma de carga se comunica con su etiqueta RFID, para confirmar si el vehículo está autorizado para recoger los productos. Luego de la aprobación, las etiquetas de los pallets se comunican con el lector RFID de la plataforma de carga, con la finalidad de alertar a los sistemas B2B y a los sistemas ERP, dando inicio a las transacciones electrónicas, confirmaciones de recojo y potencialmente iniciar la facturación de envíos.

3) DESPACHO --> CENTRO DE DISTRIBUCIÓN
Al llegar la mercadería al centro de distribución, el lector RFID identifica el ID único de la etiqueta RFID y junto al middleware inician un evento, registrando la llegada del manifiesto, actualizando el inventario e iniciando el ruteo automático de los productos al siguiente vehículo (consolidación de carga). Todo esto sin necesidad de abrir los embalajes.
4) CENTRO DE DISTRIBUCIÓN --> DESPACHO
Mientras los pallets son cargados al vehículo, las etiquetas RFID transmiten su ID único al lector RFID ubicado en la plataforma de carga, y vía el middleware RFID, se transfiere la información a los sistemas del negocio (ERP) indicando que el manifiesto ha sido cargado.

5) DESPACHO --> TIENDA
Conforme los productos llegan a la plataforma de descarga de la tienda, éstos son detectados por lectores RFID, sus sistemas ERP son actualizados para controlar sus niveles de inventario (automáticamente, con precisión y a bajo costo) y se da inicio al envío de mensages B2B con el proveedor para dar inicio al proceso de facturación.

6) TIENDA --> CONSUMIDOR (visión de largo plazo)
El lector RFID ubicado en los estantes puede detectar el retiro de los productos y a través del middleware RFID iniciar el requerimiento de abastecimiento de productos adicionales. Con sistemas de este tipo, se reduce la necesidad de mantener costosos volúmenes de inventario,y en lugar de ello, el cliente inicia la generación directa de demanda en el proceso de gestion de la cadena de abastecimiento.

7) CONSUMIDOR (visión de largo plazo)
En lugar de hacer colas esperando la atención de un cajero, el consumidor pasa a través de un lector RFID ubicado cerca de la puerta, el cual identifica a todos los productos por su ID único, haciendo necesario solamente que el consumidor deslice su tarjeta de débito o de credito para finalizar la compra.
Ventajas de RFID sobre el Código de Barras
1. No requiere “línea de vista”: La lectura de códigos de barra requiere que exista “línea de vista” directa entre el scanner y un código de barras. Las etiquetas RFID pueden ser leídos a través de materiales sin tener línea de vista.

2. Lectura más automática: Las etiquetas RFID se leen automáticamente cuando los productos etiquetados pasan cerca del lector, reduciendo el trabajo requerido para escanear el producto.

3. Ratios de lectura mejorados: Las etiquetas RFID ofrecen mayores ratios de lectura que los códigos de barra, especialmente en las operaciones de alta velocidad, como la clasificación de empaques.

4. Mayor capacidad de datos: Las etiquetas RFID pueden contener múltiples detalles del artículo, como información del lote, pedimento, peso, estilo, talla, etc.

5. Capacidades de escritura: Las etiquetas RFID pueden ser actualizados con nuevos datos conforme se concluye cada etapa de la cadena de distribución.

Retos en la implementación de RFID
Costos del Sistema: Hoy día las etiquetas pasivas tiene un costo aproximado de 40 centavos de dólar por pieza y un lector básico va desde $1,000 hasta $4,000. Según se vayan dando los
estándares, avances en la micro fabricación y una economía de escala, la industria RFID se irá aproximando al punto de tener un precio mucho mas competitivo. Mientras tanto, las aplicaciones RFID serán relativamente costosas en comparación con otros acercamientos a auto-ID.

Los Materiales importan: El agua absorbe las ondas de radio y los metales las reflejan, lo cual
hace que el rastreo que RFID se haga difícil en productos con alto contenido de agua, o de metal, o aún con empaques aluminados.

La Confiabilidad y Consistencia de la Transmisión Inalámbrica: Cualquiera que haya usado un celular sabe lo impredecible que puede ser la transmisión inalámbrica, en todas partes existen hoyos negros de no cobertura celular, por lo que es muy importante instalar una sólida estructura inalámbrica para evitar este problema.

Interferencia Electromagnética: Casi en cualquier parte a lo largo de la cadena de
distribución y especialmente en los puntos de procesamiento, auditoria y verificación, se podrán encontrar varias fuentes de interferencia electromagnética (EMI) – otros lectores, otras etiquetas, RF inalámbrico y teléfonos celulares, redes LANs inalámbricas y sistemas de transmisión de datos, luces de neón y otros más.

Variedad de Frecuencias RF: Tanto RFID como otros sistemas de auto-ID pueden usar
diferentes frecuencias de RF, sin mencionar que en cada país se puede tener diferentes asignaciones del espectro radioeléctrico para el uso de transmisiones de RF para corto alcance. Esto significa que entre los intercambios inter-compañía y/o cadenas de distribución internacionales deberá de hacerse una labor de conciliación de RF en diferentes puntos de la cadena.

Rediseño del Proceso de Negocio: Al igual que otras tecnologías emergentes, la
implementación de RFID puede requerir el rediseño fundamental de los proc esos de negocio con el propósito de optimizar los beneficios de RFID.
Compartiendo el Costo/ROI: Las aplicaciones RFID existentes son de carácter propietario y normalmente de uso exclusivo, y se espera que las implementaciones de corto plazo sigan en esos términos hasta que los estándares del Auto-ID Center se vayan difundiendo y aceptando.

Pero aun entonces, los intercambios inter-compañía a lo largo de cadenas de distribución multiempresas será altamente cuestionada sobre ¿quién paga, por qué y cómo obtiene su retorno de inversión?

Perspectivas futuras

En el 2003 investigadores del IESE, del MIT Sloan y de la Universidad de Cambridge,realizaron un estudio para cuantificar los beneficios de la implementación de RFID en uno de los almacenes de una importante empresa de bienes de consumo envasados. La investigación concluyó que la RFID puede aportar un considerable valor añadido a las empresas de bienes de consumo envasados. La RFID es especialmente beneficiosa cuando se introduce en la métrica de valor interno de un proceso. Por ejemplo, puede reducir el tiempo que se tarda en completar el proceso de recepción, la calidad de los envíos en los procesos de transporte y manejo y los costes laborales globales de los procesos de almacenamiento. Otros procesos interdependientes saldrán igualmente beneficiados. Por ejemplo, la asignación de códigos electrónicos de productos (EPC) -en lugar de los códigos de barras- a las cajas y palets aumentará la precisión del proceso de colocación de los mismos.

En definitiva, las etiquetas RFID crearán muchas fuentes de valor, desde una mejora de la eficacia en el almacén hasta un ahorro de costes de material, mano de obra y transporte y un aumento de las ventas. De hecho, los autores vaticinan que los ahorros, ganancias en productividad y oportunidades de creación de valor posibles podrían ser más cuantiosos de lo inicialmente previsto. Sin embargo, RFID está en proceso de madurez y coexistirá de manera complementaria con otras tecnologías de ide tificación automática, como el código de barras, durante varios años.

No hay comentarios:

Publicar un comentario