Intermec Technologies, lider mundial en tecnología para la captura automática de datos y cómputo móvil, anunció mejoras a sus impresoras térmicas de escritorio PF8.
La compañía indicó que las nuevas características optimizan la instalación de la impresora y minimizan el mantenimiento para aplicaciones ligeras en el transporte, mensajería, manufactura, salud, comercio minorista en tienda y entornos de oficina.
Intermec PrintSet proporciona un mecanismo sencillo para configurar la impresora y la red, descargar fuentes y gráficos. Las impresoras PF8, disponibles en transferencia térmica (PF8t) y térmica directa (PF8d), incorporan conectividad estándar y flexible que incluye paralelo, serial, USB y Ethernet interna opcional, que permite la instalación fácil en ambientes de red.
Por ejemplo, en el caso de la empresa francesa GeoPost, “la impresora PF8, responde perfectamente a la necesidad de identificar paquetes express utilizando códigos de barras, para los clientes que manejan decenas o cientos de paquetes por día”, dijo Jean-Luc Defrance, jefe del grupo de información de GeoPost.
“Es compacta y fácil de usar, por ello, es la solución perfecta para usuarios que manipulan un alto volumen de paquetes. Su compatibilidad con la impresora PC4 de Intermec, es una función extra muy útil”, señaló.
Por su parte, y en el sector salud, Tom Roth, director de marketing de Impresoras de Intermec, refirió que la PF8 cuenta con la combinación correcta de tamaño, características y precio para los negocios y aplicaciones que el cuidado de la salud requiere, un tamaño reducido y gran valor. “La impresora proporciona un rendimiento rápido y preciso con un mínimo de soporte TI, ofreciendo una impresión de etiquetas confiable y fácil de usar, tan sólo con sacarla de su caja”, concluyó.
miércoles, 19 de mayo de 2010
martes, 11 de mayo de 2010
10 Consejos para un Surtido más Eficiente
En el centro de distribución, el picking o preparación de los pedidos puede consumir hasta dos tercios del costo operativo y del tiempo de los recursos. El primer impulso de muchos es tratar de encontrar una solución a través de nueva tecnología; sin embargo, las mejoras de los procedimientos suelen ser más rápidas, económicas y mucho más efectivas que una gran inversión tecnológica. Pensando en eso, el autor presenta 10 consejos para que su almacén sea eficiente sin gastar mucho dinero.
En el centro de distribución, el picking o preparación de los pedidos puede consumir hasta dos tercios del costo operativo y del tiempo de los recursos; por lo que no resulta raro que, cuando se busque mejorar la productividad del CD, se empiece por ahí. El primer impulso de muchos es tratar de encontrar una solución a través de nueva tecnología; sin embargo, las mejoras de los procedimientos suelen ser más rápidas, económicas y mucho más efectivas que una gran inversión tecnológica. Pensando en eso, el autor presenta 10 consejos para que su almacén sea eficiente sin gastar mucho dinero.
El primero de esta decena de tips, es encontrar la causa de los atrasos; así que tómese una semana para seguir a los trabajadores del almacén y documente sus movimientos y actividades. Posteriormente, échele un vistazo al tipo de atrasos que experimentan sus empleados en un día. Por ejemplo, ¿cuántas veces van a la ubicación del artículo y éste no se encuentra ahí?, ¿cuántas veces se ve interrumpido un “piqueador” de pedidos por otros trabajadores?, ¿cuántas veces se tropieza un trabajador con otro que no opera en el mismo pasillo?
Estas cosas tan simples empiezan a resaltar y a cuantificar los aspectos que hacen que la actividad sea lenta.
Cuando realice este tipo de estudios, no se concentre en el mejor “piqueador” de pedidos, o en el promedio, observe a todos, para tener una idea más exacta.
En segundo lugar, vea maneras de reducir el tiempo de recorrido de los “piqueadores” de pedidos. Las estadísticas muestran que esto puede absorber hasta 80% del tiempo dedicado en el picking. Por consiguiente, reducir la cantidad de pasos que realizan los operarios reducirá costos e incrementará la eficacia.
Un modo de reducir el tiempo de los recorridos es crear una línea delantera de picking. Esto significa, crear un área donde se “piquean” cajas completas o abiertas.
En tercer orden, observe detenidamente la posición de la mercadería (la manera en que se asignan productos a los lugares de picking). Uno de los enfoques más comunes es colocar los productos de acuerdo a la velocidad con que se mueven, en el sentido que los productos A, de rápido movimiento, se colocan cerca del área donde se realiza el siguiente paso de la ejecución del pedido.
Los productos B, de movimiento lento, se colocan en el área siguiente inmediata, y los productos C, de movimiento más lento, están más alejados. Mientras esto puede parecer puro sentido común, muchos almacenes cometen el error de organizar sus líneas de picking basados en el tipo de producto.
Cambiar el patrón de cómo se dispone la mercadería, basado en la frecuencia de los pedidos de ese producto, puede tener un profundo impacto en la productividad. Sin embargo, hay que ser cuidadoso a la hora de identificar los productos de movimiento rápido. A usted le interesa disponer la mercadería basado en la frecuencia con que se pide un producto. En otras palabras, la frecuencia es más importante que la cantidad.
No obstante, la velocidad no es la única consideración cuando se revisa la disposición de la mercadería. Otros factores que influyen en los lugares de “piqueo” incluyen la ergonomía, el tamaño del cliente y los pedidos similares unos a otros. Por ejemplo, puede ser más efectivo surtir los objetos pesados o voluminosos al inicio del camino del picking. Se puede aumentar la eficacia estableciendo zonas dedicadas a clientes grandes y los almaceneros pueden querer que los objetos que frecuentemente se piden juntos estén uno al lado del otro, incluso si uno es un producto A y el otro es un producto C.
En el cuarto paso, se aconseja no cambiar la disposición de su mercadería una vez y luego olvidarse del asunto. La eficacia de la disposición cambia a medida que los patrones de demanda varían, se introducen nuevos productos y los antiguos se eliminan. Qué tan seguido debe volver a disponer la mercadería de manera diferente dependerá de su negocio.
La redisposición del almacén puede convertirse fácilmente en un proyecto de varias semanas. Esa es la razón por la que se sugiere concentrarse primero en los productos que toman gran cantidad de tiempo y de esfuerzo a los empleados. Llegará el punto en que realmente no importe dónde se encuentren los productos de movimiento más lento, siempre y cuando no sean un obstáculo y no impidan que los artículos de movimiento más rápido ocupen los “asientos” de la primera fila.
Prepare los pedidos en serie en lugar de uno a la vez. Surtir dos, tres o incluso diez pedidos a la vez puede tener un gran efecto en la eficacia. Los car picking que pueden cargar 10 ó 12 pedidos a la vez permiten el “piqueo” en serie, a un costo relativamente bajo.
Un quinto tip es que el picking de pedidos puede ser la mitad de eficiente si el piqueador llega a un lugar y lo encuentra vacío. Evite que esto suceda manteniendo un nivel mínimo específico de stock en cada lugar; reabastezca diariamente todos los productos que se encuentran por debajo del nivel mínimo. ¿Cuál debiera ser la cantidad mínima o máxima? Varía de compañía en compañía, pero se recomienda mantener la mitad del valor semanal del producto al alcance de la mano.
El sexto paso a considerar sería, en el posible escenario, que el equipo que usted ya tiene en su almacén no sea el más eficaz para manipular ciertos tipos de productos; entonces se recomienda que un producto de rápido movimiento puede estar mejor dispuesto en un anaquel transportador de cajas de cartón (carton flow rack), que debe ser reabastecido una vez a la semana, mientras que en anaqueles debe reabastecerse varias veces al día.
Para los artículos de rápido movimiento en cajas completas, se sugiere almacenar múltiples parihuelas en la posición de picking e instalar rieles para flujo de parihuelas que utilizan rodillos para trasladar las parihuelas por todo lo largo del piso.
El siguiente y séptimo consejo advierte mantener las cosas simples; así los “piqueadores” no tendrán que perder una excesiva cantidad de tiempo buscando los productos. Almacenar más de un producto en un mismo lugar implica que quienes surten los pedidos perderán tiempo verificando que han tomado el producto correcto; al mantener las cajas completas como las abiertas en un mismo lugar los obliga a buscar las cajas que no han sido abiertas. Utilice señales visuales para ayudar a los “piqueadores” a que verifiquen sus decisiones rápidamente.
Tip número ocho: Hacer el picking de los productos sueltos consume mucho más tiempo que en pallets o cajas completas. Se recomienda convencer a los clientes que pidan cajas completas o en cantidades de un cuarto, medio pallet o pallets completos. Eso acelerará el picking, pues reduce el trabajo manual y el tiempo necesario para el conteo y el empaquetado. Los descuentos pueden brindar el incentivo necesario para que los clientes ordenen cantidades eficientes de picking.
En noveno orden, implemente un mejor entrenamiento y ofrezca incentivos significativos como una manera de alentar a los trabajadores a que mejoren la velocidad y la exactitud del surtido. Base los incentivos en estándares de productividad. Con frecuencia, es mejor ofrecer incentivos basados en el trabajo en equipo que ofrecer incentivos personales. Los incentivos no tienen que estar relacionados con dinero; también pueden darse en forma de tiempo libre, premios o fiestas, entre otros. Pregúnteles a los trabajadores qué tipo de premio no monetario sería la mejor motivación.
Como décimo y último comentario, las recomendaciones compartidas están principalmente basadas en cambios en el procedimiento, en vez de cambios tecnológicos. Sin embargo, eso no significa que los beneficios en la efectividad no puedan lograrse implementando nueva tecnología. De hecho, para algunos la nueva tecnología puede ser la única solución práctica para sus problemas de productividad.
Sin embargo, los gerentes de logística deben intentar realizar mejoras en el procedimiento, antes de decidir añadir una tecnología nueva y equipos caros. Al final, lo más importante para tener en cuenta es: ¿qué es lo que se logra? y no ¿cómo ha sido logrado? No hay nada de malo en un sistema manual altamente eficaz.
Terminales portátiles para el futuro
Los dispositivos portátiles robustos que se utilizan en almacenes, centros de distribución y en otros entornos logísticos se usan menos del tiempo previsto y suponen un costo mayor del previsto para las empresas.
Según un estudio de VDC Research Group, las empresas tienden a sustituir las terminales portátiles al cabo de tres años y medio, es decir, aproximadamente siete meses antes de lo estimado al principio de la implantación.
En realidad, las terminales robustas tienen mayor tiempo de vida útil, pero se reemplazan prematuramente porque se considera que los procesadores, programas o funciones de captura de datos o de comunicación que contienen han dejado de ser eficaces o se han quedado obsoletos.
Ampliar la vida útil de una terminal portátil significa aumentar el valor del dispositivo. Cuando la vida útil de una terminal disminuye, también baja la rentabilidad de la inversión y, en consecuencia, se incrementa el costo total de propiedad que se refiere al costo de adquisición, implementación y mantenimiento.(TCO, total cost of ownership, por sus siglas en Inglés)–(Gartner).
Las empresas pueden tener un control casi total respecto a estos costos porque pueden aprovechar más de lo que creen la vida útil de sus terminales portátiles. Es relativamente sencillo comprobar si una terminal será rentable en el futuro –sin aumentar excesivamente los costos–, de modo que los dispositivos puedan soportar nuevos requisitos y durar el ciclo de vida útil completo.
Ruta de migración
Para las empresas, es más fácil saber qué terminales portátiles les durarán más en el entorno físico a largo plazo, que identificar qué dispositivos se ajustan mejor a sus requisitos desde el punto de vista tecnológico y empresarial, requisitos que siempre están cambiando.
El equipo puede ser robusto, consistente y duradero, sin embargo, los procesos empresariales y los requisitos de integración están en constante evolución. Un ejemplo muy claro es la preparación de pedidos mediante voz, esto era relativamente poco habitual hace unos años, pero ahora se considera una buena práctica. De manera similar, los códigos de barras 2D no son novedad, ya que forman parte de muchos formatos de etiquetas de envío.
A la hora de adquirir el equipo, las empresas necesitan considerar las tecnologías emergentes que les permitirán mejorar la productividad en el futuro en lugar de gastar grandes cantidades de dinero en sustituir los dispositivos para conseguir esas prestaciones.
La preparación de pedidos mediante voz y el formato de códigos de barras 2D seguirán extendiéndose, y es muy probable que otras tecnologías emergentes sean de uso común en un plazo de tres años. Pero ¿cuáles serán?, ¿terminales portátiles con funciones de texto, voz y video?, ¿verificación automática de pallet con RFID?
Una vez respondidas estas preguntas, las empresas se enfrentarán a otra cuestión más importante todavía: ¿las ventajas de estas aplicaciones compensan el costo de la tecnología que las hace posibles? Las terminales portátiles robustas que hay en el mercado, hoy en día admiten todas estas aplicaciones y las empresas no tienen por qué pagar necesariamente un precio extra para conseguir las funciones que posiblemente necesiten mañana.
Capacidad de lectura
Después de un largo período de mejoras relativamente pequeñas, en los últimos años la capacidad de lectura ha experimentado importantes innovaciones y avances. Para algunas de las empresas que ya usaban terminales portátiles con lectores de códigos de barras integrados en sus almacenes, algunas de las opciones de lectura que se ofrecen ahora y que aumentan más la productividad no estaban disponibles cuando implantaron las terminales.
En la actualidad hay lectores de imagen de área que pueden integrarse en las terminales portátiles y son capaces de leer códigos de barras 1D y 2D desde muy cerca o a distancias de hasta quince metros.
Esta capacidad de lectura de largo alcance era impensable hace sólo unos años, y los dispositivos capaces de leer tanto de cerca como de lejos no existían. Esto supone un avance significativo porque permite a los trabajadores de los almacenes cubrir todas sus necesidades de lectura (como escanear una etiqueta de envío a medio metro de distancia durante la fase de recepción, leer la etiqueta de una pieza pequeña desde un par de metros durante la preparación de pedidos o escanear la etiqueta de un artículo situado a 15 metros de altura) mediante un único dispositivo, sin tener que limitar los procesos empresariales en función del alcance del lector ni tener que comprar y mantener varios dispositivos.
Si las tareas actuales o futuras de la empresa implican la necesidad de escanear códigos de barras a diferentes distancias, los lectores de imagen de área con flexibilidad de alcance son una opción excelente.
En general, la tecnología de lectura de imagen es una inversión más segura y adecuada para los requisitos futuros que los lectores láser, ya que los lectores de imagen pueden leer y descodificar todas las simbologías de códigos de barras 1D y 2D.
Los lectores láser, en cambio, pueden leer códigos de barras 1D y algunas simbologías 2D. Los trabajadores de los almacenes y centros de distribución, tradicionalmente, no han tenido que leer símbolos matriciales, pero las nuevas prácticas empresariales en la fabricación y la cadena de suministro están cambiando esta tendencia. Las simbologías matriciales son especialmente adecuadas para los códigos de lote, números de serie y otros números de identificación únicos, y pueden aplicarse en elementos muy pequeños.
A raíz de la creciente demanda de documentación sobre trazabilidad y cadena de custodia, este tipo de simbologías se está extendiendo, por lo que cada vez más será necesario leerlas en los centros de distribución. Los lectores de imagen también sirven para tomar fotografías digitales con fecha, a fin de documentar los daños ocurridos antes de que la empresa se haga cargo de un determinado artículo, así como para fotografiar la mercancía que sale como comprobante de que se envían en buen estado.
Tecnología RFID
Aunque el uso de RFID no está generalizado en los almacenes y los centros de distribución, cada vez hay más empresas que están adoptando esta tecnología. Muchas compañías empiezan utilizando RFID para una pequeña parte de sus líneas de producto o para un cliente concreto, o también para hacer inventario en determinados procesos críticos o cuellos de botella. Como las implantaciones iniciales son limitadas, es importante tener una infraestructura RFID que sea escalable.
Las terminales portátiles aportan escalabilidad si el cliente puede actualizarlas para incorporar RFID. Así, las funciones de lectura y escritura de RFID pueden incorporarse cuando se necesiten en vez de tener que equipar todos las terminales portátiles con lectores de RFID que tal vez no vayan a usarse. El RFID tiene ventajas técnicas claras, por ejemplo, la capacidad de lectura y escritura sin visión directa y es la mejor opción para determinadas aplicaciones.
Una de las razones por las que el RFID no se ha adoptado rápidamente es que existen muchas tecnologías que compiten con ella, incluidos muchos productos propietarios que obligan a los clientes a usar un único proveedor. Optar por productos que cumplan con los estándares siempre es una buena política a la hora de invertir en una tecnología con futuro, y es especialmente importante en el caso de los equipos de RFID.
Impresión inalámbrica
Además de evaluar las terminales portátiles, también hay que tener en cuenta las impresoras y las formas en que se utilizarán en su empresa. La compatibilidad con sus protocolos de interfaz de red actuales es un factor importante al escoger una impresora, ya que es un aspecto que acelera el proceso de implantación.
Las impresoras de códigos de barras compatibles con las tecnologías inalámbricas de comunicación pueden integrarse fácilmente en una red ya instalada, eso significa una mayor flexibilidad a la hora de colocar las impresoras en sus instalaciones. Así se elimina la necesidad de tirar cables, se simplifica el trabajo del departamento informático y se reduce el tiempo necesario para instalar nuevas impresoras, y todo ello sin poner en riesgo la seguridad de la red.
Combinadas con una terminal portátil, las impresoras portátiles pueden mejorar operaciones como recepción, ubicación y preparación de pedidos. Las impresoras inalámbricas aportan a las empresas, especialmente aquellas que necesitan reconfigurar con frecuencia sus estaciones de trabajo, una gran flexibilidad ya que pueden colocarse en distintos sitios.
Conclusión
Casi todas las funciones de una terminal portátil tienen implicaciones respecto a la capacidad del dispositivo para cumplir con requisitos futuros y seguir siendo funcional durante toda su vida útil. Para tomar la decisión adecuada hoy, no es necesario que las empresas sepan exactamente qué funciones necesitarán mañana. Lo que necesitan es identificar las características que proporcionan flexibilidad y conocer las características que determinan si las terminales portátiles son válidas para el futuro o por el contrario, ponen obstáculos al desarrollo.
El valor que las terminales portátiles aportan a las actividades de los almacenes y centros de distribución está íntimamente relacionado con su vida útil real, lo que a su vez afecta directamente a la manera en que están fabricados y a las funciones que incluyen. Elegir bien permite a las empresas adoptar, de forma rentable, nuevos procesos de negocio y tecnologías que aumentarán las ventajas de la automatización en vez de incrementar el costo total de propiedad.
*Victor García es Gerente de Desarrollo de Negocios en RFID para México y Latinoamérica de Intermec Technologies.
Por Víctor García*
Según un estudio de VDC Research Group, las empresas tienden a sustituir las terminales portátiles al cabo de tres años y medio, es decir, aproximadamente siete meses antes de lo estimado al principio de la implantación.
En realidad, las terminales robustas tienen mayor tiempo de vida útil, pero se reemplazan prematuramente porque se considera que los procesadores, programas o funciones de captura de datos o de comunicación que contienen han dejado de ser eficaces o se han quedado obsoletos.
Ampliar la vida útil de una terminal portátil significa aumentar el valor del dispositivo. Cuando la vida útil de una terminal disminuye, también baja la rentabilidad de la inversión y, en consecuencia, se incrementa el costo total de propiedad que se refiere al costo de adquisición, implementación y mantenimiento.(TCO, total cost of ownership, por sus siglas en Inglés)–(Gartner).
Las empresas pueden tener un control casi total respecto a estos costos porque pueden aprovechar más de lo que creen la vida útil de sus terminales portátiles. Es relativamente sencillo comprobar si una terminal será rentable en el futuro –sin aumentar excesivamente los costos–, de modo que los dispositivos puedan soportar nuevos requisitos y durar el ciclo de vida útil completo.
Ruta de migración
Para las empresas, es más fácil saber qué terminales portátiles les durarán más en el entorno físico a largo plazo, que identificar qué dispositivos se ajustan mejor a sus requisitos desde el punto de vista tecnológico y empresarial, requisitos que siempre están cambiando.
El equipo puede ser robusto, consistente y duradero, sin embargo, los procesos empresariales y los requisitos de integración están en constante evolución. Un ejemplo muy claro es la preparación de pedidos mediante voz, esto era relativamente poco habitual hace unos años, pero ahora se considera una buena práctica. De manera similar, los códigos de barras 2D no son novedad, ya que forman parte de muchos formatos de etiquetas de envío.
A la hora de adquirir el equipo, las empresas necesitan considerar las tecnologías emergentes que les permitirán mejorar la productividad en el futuro en lugar de gastar grandes cantidades de dinero en sustituir los dispositivos para conseguir esas prestaciones.
La preparación de pedidos mediante voz y el formato de códigos de barras 2D seguirán extendiéndose, y es muy probable que otras tecnologías emergentes sean de uso común en un plazo de tres años. Pero ¿cuáles serán?, ¿terminales portátiles con funciones de texto, voz y video?, ¿verificación automática de pallet con RFID?
Una vez respondidas estas preguntas, las empresas se enfrentarán a otra cuestión más importante todavía: ¿las ventajas de estas aplicaciones compensan el costo de la tecnología que las hace posibles? Las terminales portátiles robustas que hay en el mercado, hoy en día admiten todas estas aplicaciones y las empresas no tienen por qué pagar necesariamente un precio extra para conseguir las funciones que posiblemente necesiten mañana.
Capacidad de lectura
Después de un largo período de mejoras relativamente pequeñas, en los últimos años la capacidad de lectura ha experimentado importantes innovaciones y avances. Para algunas de las empresas que ya usaban terminales portátiles con lectores de códigos de barras integrados en sus almacenes, algunas de las opciones de lectura que se ofrecen ahora y que aumentan más la productividad no estaban disponibles cuando implantaron las terminales.
En la actualidad hay lectores de imagen de área que pueden integrarse en las terminales portátiles y son capaces de leer códigos de barras 1D y 2D desde muy cerca o a distancias de hasta quince metros.
Esta capacidad de lectura de largo alcance era impensable hace sólo unos años, y los dispositivos capaces de leer tanto de cerca como de lejos no existían. Esto supone un avance significativo porque permite a los trabajadores de los almacenes cubrir todas sus necesidades de lectura (como escanear una etiqueta de envío a medio metro de distancia durante la fase de recepción, leer la etiqueta de una pieza pequeña desde un par de metros durante la preparación de pedidos o escanear la etiqueta de un artículo situado a 15 metros de altura) mediante un único dispositivo, sin tener que limitar los procesos empresariales en función del alcance del lector ni tener que comprar y mantener varios dispositivos.
Si las tareas actuales o futuras de la empresa implican la necesidad de escanear códigos de barras a diferentes distancias, los lectores de imagen de área con flexibilidad de alcance son una opción excelente.
En general, la tecnología de lectura de imagen es una inversión más segura y adecuada para los requisitos futuros que los lectores láser, ya que los lectores de imagen pueden leer y descodificar todas las simbologías de códigos de barras 1D y 2D.
Los lectores láser, en cambio, pueden leer códigos de barras 1D y algunas simbologías 2D. Los trabajadores de los almacenes y centros de distribución, tradicionalmente, no han tenido que leer símbolos matriciales, pero las nuevas prácticas empresariales en la fabricación y la cadena de suministro están cambiando esta tendencia. Las simbologías matriciales son especialmente adecuadas para los códigos de lote, números de serie y otros números de identificación únicos, y pueden aplicarse en elementos muy pequeños.
A raíz de la creciente demanda de documentación sobre trazabilidad y cadena de custodia, este tipo de simbologías se está extendiendo, por lo que cada vez más será necesario leerlas en los centros de distribución. Los lectores de imagen también sirven para tomar fotografías digitales con fecha, a fin de documentar los daños ocurridos antes de que la empresa se haga cargo de un determinado artículo, así como para fotografiar la mercancía que sale como comprobante de que se envían en buen estado.
Tecnología RFID
Aunque el uso de RFID no está generalizado en los almacenes y los centros de distribución, cada vez hay más empresas que están adoptando esta tecnología. Muchas compañías empiezan utilizando RFID para una pequeña parte de sus líneas de producto o para un cliente concreto, o también para hacer inventario en determinados procesos críticos o cuellos de botella. Como las implantaciones iniciales son limitadas, es importante tener una infraestructura RFID que sea escalable.
Las terminales portátiles aportan escalabilidad si el cliente puede actualizarlas para incorporar RFID. Así, las funciones de lectura y escritura de RFID pueden incorporarse cuando se necesiten en vez de tener que equipar todos las terminales portátiles con lectores de RFID que tal vez no vayan a usarse. El RFID tiene ventajas técnicas claras, por ejemplo, la capacidad de lectura y escritura sin visión directa y es la mejor opción para determinadas aplicaciones.
Una de las razones por las que el RFID no se ha adoptado rápidamente es que existen muchas tecnologías que compiten con ella, incluidos muchos productos propietarios que obligan a los clientes a usar un único proveedor. Optar por productos que cumplan con los estándares siempre es una buena política a la hora de invertir en una tecnología con futuro, y es especialmente importante en el caso de los equipos de RFID.
Impresión inalámbrica
Además de evaluar las terminales portátiles, también hay que tener en cuenta las impresoras y las formas en que se utilizarán en su empresa. La compatibilidad con sus protocolos de interfaz de red actuales es un factor importante al escoger una impresora, ya que es un aspecto que acelera el proceso de implantación.
Las impresoras de códigos de barras compatibles con las tecnologías inalámbricas de comunicación pueden integrarse fácilmente en una red ya instalada, eso significa una mayor flexibilidad a la hora de colocar las impresoras en sus instalaciones. Así se elimina la necesidad de tirar cables, se simplifica el trabajo del departamento informático y se reduce el tiempo necesario para instalar nuevas impresoras, y todo ello sin poner en riesgo la seguridad de la red.
Combinadas con una terminal portátil, las impresoras portátiles pueden mejorar operaciones como recepción, ubicación y preparación de pedidos. Las impresoras inalámbricas aportan a las empresas, especialmente aquellas que necesitan reconfigurar con frecuencia sus estaciones de trabajo, una gran flexibilidad ya que pueden colocarse en distintos sitios.
Conclusión
Casi todas las funciones de una terminal portátil tienen implicaciones respecto a la capacidad del dispositivo para cumplir con requisitos futuros y seguir siendo funcional durante toda su vida útil. Para tomar la decisión adecuada hoy, no es necesario que las empresas sepan exactamente qué funciones necesitarán mañana. Lo que necesitan es identificar las características que proporcionan flexibilidad y conocer las características que determinan si las terminales portátiles son válidas para el futuro o por el contrario, ponen obstáculos al desarrollo.
El valor que las terminales portátiles aportan a las actividades de los almacenes y centros de distribución está íntimamente relacionado con su vida útil real, lo que a su vez afecta directamente a la manera en que están fabricados y a las funciones que incluyen. Elegir bien permite a las empresas adoptar, de forma rentable, nuevos procesos de negocio y tecnologías que aumentarán las ventajas de la automatización en vez de incrementar el costo total de propiedad.
*Victor García es Gerente de Desarrollo de Negocios en RFID para México y Latinoamérica de Intermec Technologies.
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